sábado, 23 de noviembre de 2013

Princesa



Entre la cirrosis y la sobredosis andas siempre, muñeca.
Con aquella camisa y, en lugar de sonrisa, una especie de mueca.
¿cómo no imaginarte, Cómo no recordarte, hace apenas unos años?
Cuando eras la princesa de la boca de fresa,
Cuando tenías aún esa forma de hacerme daño.
Ahora es demasiado tarde, princesa.
Búscate otro perro que te ladre, princesa.
Maldito sea el gurú que levantó entre tú y yo un silencio oscuro,
Del que ya sólo sales para decirme, vale,
"Déjame veinte euros".
Ya no te tengo miedo nena, pero no puedo seguirte en tu viaje.
Cúantas veces hubiera dado la vida entera
 porque tú me pidieras llevarte el equipaje.
Ahora es demasiado tarde, princesa...
Tú que sembraste en todas las islas de la moda las flores de tu gracia,
¿cómo no ibas a verte envuelta en una muerte con asalto a farmacia?
¿con qué ley condenarte si somos juez y parte todos de tus andanzas?
Sigue con tus movidas, pero no pidas que me pase la vida
Pagándote fianzas.
Ahora es demasiado tarde, princesa
Búscate otro perro que te ladre, princesa

Postdata: Se me olvidaba pedir perdón a Joaquin Sabina por destrozar su hermosa canción